Uncategorized
TLAXCALA: EL ESTIGMA
La ciudad de Tlaxcala fue fundada bajo el imperio español en 1527, gozando de un trato especial hacia sus indígenas.
Sin embargo, como desde antes de la conquista, durante la colonia y luego de la independencia de México, Tlaxcala se mantuvo como una sociedad cerrada hacia el resto del país.
Tardó casi tres décadas en ser reconocido como estado tras el movimiento independentista, y la Constitución de 1824 dejó a su territorio en la indefinición.
El sentimiento de nacionalismo que generó la lucha por la emancipación de México chocó con la fidelidad que Tlaxcala tenía con España, lo que le acarreó resentimiento.
Han pasado cinco siglos y aquella alianza tlaxcalteca-española no ha sido fácil de digerir, incluso en un ambiente de más apertura social y comunicación.
Una mezcla de burla y bullying desde el resto del país se vierte sobre el estado más pequeño de México, cuya existencia se pone en duda en las redes sociales, y en el mejor de los casos, se le concede ser un apéndice territorial de Puebla.
Un ejemplo claro de ello se registró en 2017, cuando diversos medios publicaron que, durante la inauguración de la tienda Fábricas de Francia, en Apizaco, se pusieron en marcha las primeras escaleras eléctricas en la entidad.
La nota generó expresiones de escarnio a nivel nacional en torno al desarrollo social del estado.
(Encuentra el artículo completo de la BBC aquí)