POLÍTICA Y PARTIDOS
LA REFORMA ELÉCTRICA BENEFICIA A MÉXICO, ASEGURA LA DIPUTADA FEDERAL DULCE SILVA
LUIS ROMERO
Junto con un grupo de legisladores de Morena, la diputada federal Dulce Silva participó en un desayuno con representantes de medios de comunicación nacionales para exponer y clarificar diferentes puntos de la Reforma Eléctrica que impulsa el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Afirmó que este proyecto legislativo está pensado “para beneficiar a las y los mexicanos, recibiendo un trato parejo y ayudando a que la energía llegue a los lugares más recónditos del país y no solo a donde les convienes a los privados”.
En este encuentro, se expuso que, hasta el año 2000, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) había producido, distribuido y comercializado el 100% de la energía eléctrica en México, pero actualmente sólo genera el 38%.
Actualmente, hay dos millones de personas sin acceso a la energía eléctrica en 32 mil poblaciones rurales, lo que afecta su calidad de vida y sus oportunidades de desarrollo para el futuro, y bajo las circunstancias actuales, las empresas privadas nunca invertirán en llegar a estas localidades debido a la complejidad y altos costos que implica llevar electricidad a todos los rincones del país
En Estados Unidos, el gobierno tiene el control del 85% de la energía eléctrica, lo que le permite a esta nación llevar a cabo los grandes proyectos de infraestructura necesaria para lograr polos de desarrollo regionales, garantizar la rentabilidad de las empresas públicas y asegurar bajos costos para los usuarios del servicio.
En este contexto, la nueva Reforma Eléctrica propone que las empresas privadas mantengan el 46% de la producción, y la CFE, el 54%, un porcentaje mucho menor a los parámetros estadounidenses, a fin de garantiza la capacidad de producción de la paraestatal en proyectos con compromiso social.
De esta manera, CFE seguirá invirtiendo en beneficio de las zonas marginadas del país, y abonar a la planeación del crecimiento económico de las regiones mexicanas que hoy necesita de fuentes de ingreso, ya que en las condiciones vigente las empresas privadas únicamente invertirían donde ya hay industria y un mercado rentable.
Además, grandes cadenas como Waltmart, Kimberly-Clark, Liverpool, Palacio de Hierro, y Oxxo, entre otras, consumen el 60% de la energía eléctrica del país, con precios muchos más bajos de los que cubren los ciudadanos y su familia, debido a vacíos legales que les permiten aprovechar subsidios del gobierno bajo la figura de unidades de autoabasto.
Finalmente, respecto a la contaminación que se genera CFE para producir energía, se señaló que se trata de un mito, ya que el 39% de su producción es a través de procesos limpios, mientras que, en el caso de las empresas privadas, solo el 17% de su producción es través de energías limpias, por lo que se deben aprovechar más los recursos naturales con los que cuenta México para hacerlo más atractivo y competitivo para las inversiones nacionales y extranjeras.
Por ello, se insistió en que la reforma eléctrica pondrá piso parejo para que los privados y la paraestatal se vuelvan más eficiente y competitivas, con un modelo de priorización a las empresas que mantenga un mejor costo de distribución en términos reales para que los usuarios tengan más calidad, continuidad y precio justo en su consumo de electricidad.