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LA MALA CALIDAD DEL AIRE, ¿SIGNO DEL CAMBIO CLIMÁTICO?
Los tlaxcaltecas han tenido muy malos días debido a los efectos de una contingencia ambiental extraordinaria que afecta a los estados que integran la megalópolis de la Zona Metropolitana del Valle de México, es decir, la Ciudad de México, el Estado de México, Puebla, Tlaxcala, Hidalgo y Morelos.
Esta situación medioambiental sin precedentes se ha manifestado a través de una bruma causada por partículas de polvo, ceniza y hollín ocasionados por emisiones contaminantes, particularmente incendios forestales.
Debido a que los escenarios de cambio climático para el estado proyectan una condición más seca, asociada a una menor humedad en el suelo, se estima que el riesgo de incendios en bosques aumentará, así como la tasa de pérdida de cubierta forestal.
De acuerdo con investigadores del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la Universidad Autónoma de México (UNAM), “el cambio climático vendrá a acelerar la pérdida de bosques en Tlaxcala, y en dos o tres décadas será muy poco los que quede por conservar”.
Se anticipa que, para el año 2080, sólo quedará alrededor de 40 por ciento de la superficie forestal que estaba en pie en el año 2000; esto es, que de 17 mil 203 hectáreas sólo quedarán siete mil, si no se modifican desde ahora las condiciones que ponen en riesgo la preservación de los bosques.
¿Cuáles son las causas y los efectos de este fenómeno? ¿Qué puede hacer Tlaxcala para contener y contrarrestar sus efectos?
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